La espironolactona y la eplerenona son diuréticos ahorradores de potasio.

Esto significa que "ahorran" (reducen) el potasio que se elimina por la orina, por lo que éste se acumula en la sangre. Por ello, el médico puede solicitar analíticas periódicamente para controlar el potasio. El control del potasio debe ser especialmente frecuente cuando se inicia el tratamiento o cuando se aumentan las dosis del fármaco. No hay que olvidar que los pacientes con insuficiencia cardiaca suelen tomar a la vez otros fármacos que también aumentan el potasio en la sangre, como los IECAs o los ARA II. En ocasiones producen ginecomastia (dolor en el pecho).

La espironolactona es un fármaco usado desde hace muchos años. Inicialmente, su utilidad principal era como diurético; para que tenga este efecto es necesario darlo a dosis medias o altas (50-100 mg al día). Mientras que otros diuréticos (furosemida, torasemida, tiazidas) aumentan la cantidad de potasio que se pierde por la orina, la espironolactona hace que el riñón reabsorba potasio de nuevo a la sangre. Por ello, es ocasiones se dan ambos tipos de diuréticos (los que ahorran y los que pierden potasio) para que la cantidad total de potasio en la sangre no varíe.

Sin embargo, la espironolactona no se utiliza habitualmente en la insuficiencia cardiaca como diurético, sino por la capacidad que tiene de aumentar la supervivencia de los pacientes que la reciben.

Deben tomar espironolactona todos los pacientes con insuficiencia cardiaca sistólica por disminución severa de la contracción del ventrículo izquierdo (disfunción ventricular izquierda severa) y que presenten síntomas importantes de insuficiencia cardiaca a pesar del tratamiento con un IECA y un betabloqueante.

La espironolactona se suele usar en dosis bajas (25-50 mg al día), aunque el médico puede necesitar dosis más altas en un determinado paciente según sea la respuesta al fármaco.

La espironolactona causa, en un pequeño porcentaje de los pacientes, un incremento del volumen del pecho en ocasiones doloroso, denominado ginecomastia. Si esto ocurre, debe ser sustituida por eplerenona.

La eplerenona también se utiliza en pacientes inmediatamente tras un infarto de miocardio que daña de forma moderada el ventrículo izquierdo, y que tienen insuficiencia cardiaca o que son diabéticos.