La causa de la insuficiencia cardiaca debe ser siempre investigada en todos los pacientes. En la insuficiencia cardiaca el corazón no puede desempeñar adecuadamente su función de bomba impulsora de la sangre debido a que ha sufrido algún daño que ha alterado su normal funcionamiento. En este artículo de Introducción y en los siguientes 6 artículos ofrecemos toda la información que necesita el paciente sobre "Causas de la Insuficiencia Cardiaca".

No existe una única causa de insuficiencia cardiaca. Muchas enfermedades del corazón y diversos agentes tóxicos dañan al corazón de distintas formas, pero todas ellas tiene algo en común: con el paso del tiempo acaban produciendo insuficiencia cardiaca.

La causa más frecuente de insuficiencia cardiaca en los países desarrollados es la enfermedad de las arterias que llevan la sangre al corazón (arterias coronarias). Estas arterias se obstruyen con el paso del tiempo debido al acúmulo de grasa en sus paredes, de forma que la sangre no puede pasar con normalidad por su interior. La angina de pecho, el infarto de miocardio, la cardiopatía isquémica, la enfermedad coronaria son términos que se utilizan para expresar que las arterias del corazón están enfermas, y pueden acabar produciendo insuficiencia cardiaca.

La hipertensión arterial es otra causa frecuente de insuficiencia cardiaca. El 60-70% de los ancianos tienen hipertensión arterial. Además, muchas personas la padecen pero ni siquiera lo saben, pues no se controlan con cierta regularidad las cifras de presión arterial. Y en los pacientes diagnosticados de hipertensión arterial, con gran frecuencia no se logra un adecuado control de las cifras de tensión arterial, por no recibir suficiente medicación, tolerar mal el tratamiento o, simplemente, porque los pacientes se cansan de tomar las pastillas que le ha recomendado su médico y abandonan el tratamiento. Si las cifras de tensión arterial están elevadas, con el paso del tiempo es posible desarrollar insuficiencia cardiaca.

Hay muchas enfermedades distintas del corazón que producen daño del músculo cardiaco. Esta alteración de la función del corazón puede agravarse con el paso del tiempo. Así, las miocardiopatías (enfermedades que atacan directamente al músculo cardiaco), las enfermedades de las válvulas del corazón o la miocarditis (inflamación del corazón) pueden producir insuficiencia cardiaca. El tratamiento adecuado de la enfermedad puede en algunos casos evitar, o al menos retrasar, la aparición de los síntomas propios de la insuficiencia cardiaca.

Hay muchos agentes tóxicos que pueden dañar al corazón. En nuestro país el más frecuente es el alcohol; su consumo en grandes cantidades daña directamente al músculo cardiaco. Pero también el consumo de cocaína o de tabaco puede acabar produciendo insuficiencia cardiaca, al favorecer la enfermedad de las arterias coronarias. En ocasiones el efecto tóxico en el corazón se produce a consecuencia de tratamientos agresivos que se aplican para curar ciertas enfermedades, como ocurre con la radioterapia o la quimioterapia para el tratamiento del cáncer: ambas pueden dañar la función del corazón.

Otras muchas enfermedades no cardiacas pueden acabar produciendo insuficiencia cardiaca: la diabetes mellitus, la infección por el VIH, las alteraciones hormonales o las deficiencias vitamánicas, entre otras muchas.

Finalmente, con cierta frecuencia no es posible determinar la causa de la insuficiencia cardiaca (se dice entonces que es "idiopática" o de causa desconocida). En raras ocasiones la insuficiencia cardiaca se debe a una alteración genética, por lo que puede transmitirse de padres a hijos.

En los 6 artículos siguientes ofrecemos una amplia información sobre "Causas de la Insuficiencia Cardiaca":